Buen día nos dé Díos.
La vida es color y siempre hay que saber apreciar las tonalidades de cada momento.
Me niego a vivir una vida en blanco y negro pero sobre todo rehuyo de una vida gris. No, nosotros estamos obligados a dar color a la vida porque si no lo hiciéramos así estaríamos llevando la contraria al mismo Dios.
Y vivir una vida en color es lo mismo que hacer que los demás lo hagan.
El color de la Alegría, el color de la Esperanza, el color del Amor, el color del perdón, el color y calor de la caridad, el color de la Fe hace veamos en todos los rincones esos necesarios colores que tanto nos ayudan a ver cada día de nuestros días con esa clase de Alegría que da vida por sí misma.
Ver y vivir la vida desde el color es fijarte en esos detalles llenos de inmensa Belleza que suele pasar desapercibida si no tienes la mirada conectada con el corazón.
Por eso es inmensamente necesario ver y disfrutar a cada instante el color de la vida pues teniéndolo lo puedes compartir con el resto de tus semejantes que también están muy necesitados de una vida en color.
¡Feliz martes!
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo, y que Dios nos siga bendiciendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario