Buenos días Villaluenga.
Buen día nos de Dios.
A lo mejor hoy es un buen día para dejar que el otro sea como es y no tanto como nosotros quisiéramos que fuese.
Cuando miramos, y juzgamos, a los demás desde nuestra óptica tienen mucho que perder pues nadie, con su personalidad definida, podrá ser jamás como nosotros los hemos "etiquetado".
Creo que este mundo sería más humano, más sencillo, más cálido si en vez de aplicar ese rigor tan innecesario con los demás los dejáramos ser tal cual son, con sus virtudes y defectos, y respetarlos y quererlos.
Dios no nos cerca sino que nos deja plena libertad porque nos Ama de verdad y confía en nosotros. Nosotros en cambio si nos encargamos de poner límites a todos otorgando espacios de libertad a quienes se "comportan" como queremos y juzgando a todos los que se desmarquen de las pautas que hemos establecido.
Siempre he pensado que hay que ser escrupulosamente respetuoso con la libertad y con la personalidad del otro, de tu semejante, porque nadie ni nada puede cambiar a la fuerza sino a lo sumo evolucionar a base de confianza, cariño, respeto y admiración.
Nos quejamos que este mundo maltrata a todos y sobretodo a los más inocentes. ¿Pero quién es el mundo?
No olvidemos que el "mundo" empieza por nosotros mismos y si queremos ir cambiándolo tenemos que empezar desde donde nos movamos, con quienes conozcamos y en todo lo que hacemos.
A lo mejor, hoy es un buen día para dar un abrazo y que en él se compendie y pueda ser transmisor del Amor que Dios nos tiene a cada uno de nosotros.
Por mi parte te doy un fuerte abrazo y gracias por estar ahí seas quien seas.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
