miércoles, 20 de mayo de 2015

desde el tren. 20 de mayo.




Buen día nos de Dios. 

¡ Qué grande es hablar con Dios como el Padre Misericordioso que es! 

Jesús le confía a todos los discípulos para que los siga protegiendo de las zarpas de un mundo cruel que desgarra e intenta aniquilar a los que han puesto sus vidas en las manos del Creador. 

Padre, guárdalos de todo mal. 

Qué preciosa y extraordinaria protección tenemos los que somos de Dios y a Él dedicamos la vida. 

Podrán intentar destruirnos aunque no llegarán a rozar ni un solo de nuestros cabellos porque nos protege y cuida el Señor.

Jesús nos pide a cada instante que nos consagremos con la Verdad y que hagamos de esta nuestro particular caminar por esta tierra para llegar al Cielo. 

Y consagrando nuestras vidas estamos cumpliendo la Voluntad de Dios que debe ser nuestro alfa y omega de cada día. 

Jesús que vino al mundo para redimir nuestros pecados y padeció martirio hasta morir en la cruz venció a la muerte con su resurrección y está sentado a la diestra de Dios Padre y a la vez está junto a cada de nosotros aunque muchas no sintamos su presencia ni la queremos sentir y aun así tenemos su Amor y su Protección. 

En una sociedad que nadie da nada por nada está el Señor que nos da Todo aunque nosotros no seamos capaces de ofrecer absolutamente nada. 

Por eso el ser cristiano en el mundo de hoy, de siempre, es nadar contracorriente sin guardar la ropa porque estamos y nos sentimos protegidos por Aquel que nos conforta. 

Yo también te pido Padre que guardes de todo mal a esta Humanidad que camina por senderos oscuros y peligrosos así como a todos mis hermanos en la fe sea cual sea su apostolado. 

Y en especial a mi querido hermano Juan José López Cartón y su querida Familia. Él sabe por qué. 

Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.

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