Buen día nos de Dios.
La vida es un continuo tender puentes, abrir la mano y los brazos permitiendo que todos formen parte de ti, tener la certeza de que todos nos son necesarios e imprescindibles.
Sólo el radicalismo en ideas, opiniones, pensamientos e incluso creencias separa el uno del otro creando ese malestar, ese recíproco amargo sentimiento.
Cristo nos dice a diario que si tienes algo contra tu hermano lo arregles antes con él y después darás cuenta a Dios de tus quehaceres.
No podemos permitirnos el lujo de estar uno frente a otro y más cuando pensamos y creemos casi de igual manera.
Nuestro corazón está preparado para el Amor y no para el sufrimiento y más cuando es innecesario.
¡Es tan fácil Amar que parece que nosotros nos perdemos en los vericuetos de la vida antes de llevar esa máxima a nuestras propias existencias!
Más se consigue con una gota de miel que con litros de hiel. Más se consigue hablando, debatiendo que intentar imponernos a los demás. Todos necesitamos ser escuchados porque todos tenemos una opinión diferente aunque pueda ser igual.
Por eso hoy en esta reflexión os invito a abrir los brazos, a crear y tender puentes porque haciéndolo así haremos felices a muchos y el espacio donde habitamos será inundado por el Amor.
Quiero dedicar a mi buen García García Martín esta reflexión por el día de su cumpleaños así como un querido amigo Rafael Hera Martin ambos siempre están"tendiendo puentes".
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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