Buen día nos de Dios.
Hagamos lo que hagamos debemos intentar que sea en comunión.
Dios Padre nos hizo hermanos y así debemos intentar comportarnos.
Parece mentira como caminamos por este mundo de Dios divididos, desconfiando unos de otros, subidos a pedestales de soberbia y orgullo que solo trae injusticias e inseguridad en todos en quienes eran dignos de confiar.
En un mundo esclavizado por tantos intereses y con tantos dueños y señores nosotros somos unos auténticos privilegiados por tener un solo Señor que no nos trata como súbditos e inferiores sino con el Amor de un Padre hacia sus hijos. Qué no espera que hagamos más de lo que podamos hacer y sólo nos exige que cumplamos Su Voluntad: ¡Hacer el Bien a destajo! ¡Entregar Amor a espuertas a todos sin excepción ni condición!
Quieren imponernos un mundo sin Amor que es lo mismo que decir Sin Dios y eso no será posible mientras los que conformamos la Iglesia empeñemos nuestras vidas en anunciar un Reino donde el Señor es el más humilde Servidor, donde el Primero es el Último, donde la corona no es de oro y diamantes sino de espina, que no necesita un rico sarcófago o panteón porque ha Resucitado.
Vivir cada instante en comunión como hermanos que somos es dar gracias a Dios con nuestro comportamiento.
Esta reflexión se la quiero dedicar a mi buen hermano Rafael Lopez Carrillo porque gracias a Jesús que está Prendido en nuestros corazones hemos compartido un rato de vivencia y convivencia como verdaderos hermanos en la Fe que nos une.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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