Buen día nos dé Dios.
La verdad es que llevo muchos años en la red y en la misma, en sus calles, he conocido tanto personal como virtualmente a grandes personas con las que me une una honda amistad, un cariño perdurable y una admiración sincera. Os puedo decir que cuando hemos tenido la oportunidad de darnos un abrazo de los de verdad es como si nos conociéramos de toda la vida porque en verdad tanto uno como otros compartimos la vida por medio de la red.
Llevo muchos años en esto, de hecho he tenido el inmenso privilegio de asistir a varios congresos internacionales como ponente donde he ofrecido mi versión y también he aprendido con los demás ponentes, como para no saber que en el universo internet existe lo mejor y lo peor del propio mundo.
Lo peor todos lo sabemos, todos nos lo imaginamos y a lo mejor hasta nos quedamos cortos...
Y lo mejor también y seguro que nos quedaremos cortos.
Inundar de buenas noticias tu día a día, de reflexiones que nos ayuden a ayudar, de manifestar tu opinión con total libertad y también respeto a las de los demás así como conseguir muy buenas amistades de las que se aprenden todos los días. Estos amigos virtuales que a la larga o la corta se vuelven personales no tienen que tener tu misma forma pensar, de opinar, pero si tienen que tener esa meta que es vivir de forma apasionada.
En la madurez de la vida en la que me hallo reconozco que siento y mucho cuando alguno decide transitar las calles virtuales de la red porque supone el no "vernos" a diario, no compartir vivencias pero comprendo que un alejamiento siempre es bueno porque esto quita muchas horas que tiene el día y a veces es necesario e imprescindible hacer otras cosas.
Reconozco que no sé si a mí algún día me llegara la hora porque todo lo que hago o dejo de hacer lo pongo en las manos del Señor y Él sabe siempre lo que mejor me conviene y si en este campo siempre por sembrar soy un útil o no.
Hoy, debo reconocerlo, estoy triste porque una querida amiga ha decidido por voluntad propia dejar estas calles virtuales, esta guerrera valiente y decidida con la que he compartido mil batallas, ha decidido que quiere dedicar su tiempo a lo que considera vital e imprescindible. Leyendo sus razones tengo que decirle que tiene toda la razón aunque eso no es óbice para lamentar su voluntaria marcha de estos lares.
Nos deja una página como es Quiero a la Guardia Civil que la administra Pily Fernández y que atesora más de 82.000 lectores, nos deja inolvidables momentos, buenos momentos así como sus ilusiones, sus esperanzas....
Sé que algún día volverá o no o quién sabe pero debo reconocer que pierdo ese día a día de la relación virtual aunque no de la amistad pues bien sabe que estaré siempre que me pueda necesitar como ella ha estado siempre con nosotros, con todos los que ha tenido y tiene como amigos.
Dios creó al hombre a su imagen y semejanza. El hombre es creador de mucho de lo que el mundo tiene como es internet que es un espacio de comunicación vital que une pueblos por más recónditos y alejados que puedan estar y por medio de este medio podemos llevar su mensaje, su Palabra de Fe y Esperanza a todos sin excepción. Esa es la grandeza de internet, eso es utilizar bien este medio de medios, así como conseguir buenos amigos que te lo encuentras en un momento de tu vida y te acompañan hasta el mismo final.
Te deseo todo lo mejor en esta nueva vida, alejada de internet, que inicias querida amiga y sobre todo deseo que seas inmensamente Feliz hoy y siempre.
Gracias mi querida Mari Carmen Gomez Sanchez por tu inmenso patrimonio que dejas, por cuánto has hecho y haces a diario
Un beso muy grande y ya sabes donde me tienes.
¡Feliz martes!
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo
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