sábado, 11 de octubre de 2014

desde el tren. 11 de octubre.

Buen día nos de Dios. ¡Qué diferente son los amaneceres!
En Jerez el cielo aparece más tímido porque en su mayoría está tapado por las edificaciones y en mi bendito pueblo de Villaluenga del Rosario, al cual hecho tanto de menos, es todo lo contrario: La inmensidad del cielo sirve de cúpula a las blancas casitas que rodean este privilegiado lugar lo mires por donde lo mires.
¡Todo es distinto en nuestras vidas aunque parezca igual!
No es justo mirarlo todo desde la perspectiva que le asignemos a cada situación. Si un momento es desagradable no tiene por qué serlo siempre, si una persona no nos cae bien no tiene porque caernos mal siempre, si algo no nos gusta puede ser que con tiempo acabe por gustarnos.
Creo que no debemos etiquetar de "por vida" nada ni nadie porque seremos tremendamente injustos con ellos y también con nosotros pues ni le daremos ni nos daremos ninguna oportunidad a sorprendernos gratamente. No todo está preestablecido ni tiene porque estarlo.
Si Dios nos quiere a todos por igual tendremos que intentarlo nosotros al menos con nuestros hermanos y con las situaciones que vivimos en nuestro día a día.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
Seguimos durante todo el día de hoy en el IV Encuentro Internacional de Blogueros con el Papa donde tenemos mucho que compartir y aprender.

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