Buen viernes nos dé Dios.
Ayer me decía Hetepheres: "Jesús tú tienes una personalidad muy definida, muy tuya, muy propia"... y terminó con una inmensa sonrisa como diciéndome por gestos que le gustaba que fuera como soy sin más conservantes, colorantes y ni artificios añadidos.
Pienso que todos tenemos nuestra propia personalidad o por lo menos la deberíamos tener. Nadie es igual que nadie, nadie tiene los mismos gustos, nadie es un clon del otro pues si a uno le gusta el azul a otro el verde, si uno es de vivir el día otro la noche, si uno es de vestir más informal a otros lo contrario, si a unos les gusta una música a otro le puede gustar lo contrario y eso es lo normal pero desgraciadamente no es lo corriente.
Solo hace falta echar un vistazo a la calle, a tu calle, y salvo en las pequeñas localidades, se abren ante ti una cantidad ingente de personas todas iguales, todas con el mismo peinado, todas con el mismo corte de pelo, todas con variopintos tatuajes, todos con argollas, todos los hombres con el mismo corte de barba, todos con los mismos pantalones, vestidos, maquillaje... ¡Todos iguales salvo las características físicas de cada cual! Todos escuchando el mismo tipo de música, todos con el gusto de todos...
Qué triste, ¿Verdad?
Y muchos de esos que vemos casi "clonados" pensando igual, opinando igual, creyendo en nada y lo que es peor sin creer en ellos mismos.
Ahora prima lo que prima pero a ver quién es el primo que se entera...
Ahora Dios, que sigue estando, no se le espera, ahora el esfuerzo, la constancia, el aprendizaje, la vocación de servicio, queda muy alejado de lo que nos envuelve y rodea. Ahora el honor no es que sea o no una condición humana sino que se ignora incluso su significado, ahora la amistad está muy devaluada, ahora las relaciones de pareja no se llevan y del matrimonio ni te cuento...
Nos están metiendo en un mundo igual para todos donde todos somos iguales que no quiere decir que por eso seamos más felices.
Por eso doy gracias a Dios de ser como soy, por tener mi personalidad tan definida, tan mía, tan única...
Y por eso no me importa manifestar abiertamente que creo en Dios y además que soy muy Feliz haciéndolo, que me gusta lo que me gusta, que creo en la Verdad, en la Amistad, en el Honor, en la palabra dada, en el Bien, en la Justicia, en el Perdón, en la Misericordia.
Y soy español, amo a España, y disfruto con todas sus Tradiciones, todos los valores que son nuestros, nuestra forma de creer, de vivir la piedad popular por más que les pesen a esos que todo nos lo quieren quitar, esos que defienden una cosa aquí aunque en verdad hagan la contraria.
Y degusto una buena copa de brandy mientras me fumo un buen cigarro puro a la salud de todos hasta de esos que no me pueden ver ni en pintura que en definitiva son unos meapilas que no sirven ni para estar escondidos.
La vida tiene más color si añades tu propio color.
¡Feliz viernes!
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