Buen domingo Villaluenga.
Buen domingo nos dé Dios.
Ayer se cerraba el día con el fallecimiento de dos personas queridas en La Isla de mis orígenes que hizo la tristeza me invadiera pero hay que reconocer que son en los momentos de dolor cuando se percibe mejor lo que es y entendemos por Esperanza.
Hoy el día ha abierto, hace incluso calor, y el sol embellece cada rincón de este bendito Pueblo acunado por el sempiterno Caíllo, hoy también con este inmenso regalo que el día a día se puede percibir de la mejor manera posible la Esperanza.
El otro día conversando con un querido amigo, un buen hermano en la Fe, me comentaba la secuencia, el itinerario, que está llevando con pruebas y más pruebas médicas para que le diagnosticaran una patología que le está afectando y mucho. Estaba alegre, estaba contento, porque había asumido que el dolor es el camino más recto hacia la salvación, que vivir en la Esperanza aunque cueste la misma vida afrontar la vida es hacerlo en plenitud.
Hoy el Señor nos vuelve a ofrecer su Amor para que vivamos, para que realicemos nuestra misión, para que ayudemos a construir un mundo mejor donde el Amor sea el común denominador porque teniéndolo se vive y se goza la vida de otra manera porque es así en realidad como se debería vivir la vida.
¡Feliz domingo!
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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