Buen día nos dé Dios.
¿Qué mundo estamos construyendo?
Cada día que pasa somos más individualistas, queremos estar más alejados de todo, de todos, lo mío es lo principal, lo de los demás no vale la pena interesarse, yo soy el único que sufro y no miro alrededor mía porque no quiero sufrir "gratuitamente". Cada día dejamos de ser personas, con corazón de personas, con la dignidad de personas para convertirnos simplemente en seres robotizados donde todos podemos ser lo que queramos, cuando queramos, según nos programen.
En este mundo sin creencias porque bien que nos han educados descreídos Dios ni está ni se le espera. La relajación mental, el karma, ha sustituido a la meditación, a la oración, a la trascendencia. Virtudes como la fidelidad, el honor, la palabra dada, es una reminiscencia de un pasado que en verdad no vale la pena recordar pues entonces los hombres y mujeres tendían a ser personas con mentalidad propia, con pensamiento propio.
Por eso cuando veo a los perros, sobre todo, a los gatos a los que tú has salvado de un futuro incierto y que son capaces de dar la vida por ti me acuerdo de lo todo lo que Dios hace por mí a cada instante y yo soy capaz de vivir en Él, de hablar de Él, de defender su Palabra de Vida ante todo y todos aunque a mí me cueste la pena del destierro social en el mejor de los casos.
Por eso cuando veo a los animalitos que nos rodean pienso que Dios nos pone ejemplos visibles para que nos demos cuenta el Amor que nos profesa. Y si un perrito es capaz de dar la vida por ti porque un día lo salvaste creo que también nosotros deberíamos poner nuestros talentos, dar incluso la vida por Dios, porque nos salva todos los días.
¡Feliz jueves!
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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