Buen día nos de Dios.
Es una sensación indescriptible el verte envuelto por la niebla pues te sientes solo porque no ves ni la punta de tus propios zapatos.
La temperatura baja y el frío se intensifica hasta hacerse mucho más nítido. Os aseguro que es un buen momento para encontrarte en soledad aunque nunca solo pues notas que Dios nunca te abandona y menos cuanto más se necesita.
Como experiencia es bonita, enriquecedora y muy necesaria porque en demasiadas ocasiones caminamos con tanto equipaje, con tantas distracciones, con tantos sueños que viene bien el quedarte solo en medio de la densa niebla para sentir en el corazón a Dios que en demasiadas ocasiones lo tenemos abandonado de nuestra propia vida.
Es necesario que tengamos que detenernos pues no alcanzamos ver ni el camino ni la misma pisada aunque en medio de la nada que es verse envuelto por la niebla podemos llegar a sentir la calidez del Amigo que nunca Falla, que siempre está aunque nosotros no estemos en demasiadas ocasiones junto a Él.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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