4 de mayo. La vida son momentos...

Buen día nos dé Dios.

La vida son momentos y de esos momentos se va escribiendo la propia historia de nuestra vida.

Momentos que hay que degustar como lo más sublime, lo más delicioso, lo más intenso, lo que te lleva con solo cerrar los ojos a recordar lugares, personas, vivencias, recuerdos...

Momentos vividos que te acuerdas de ellos cuando los revives de nuevo, momentos que son tan tuyos como la sangre que recorre todo tu cuerpo, momentos que viven con especial apasionamiento, momentos que en verdad forman de tu vida pues en ellos está tu corazón, tus recuerdos.

Momentos en con tus padres, en mi caso madre, momentos con tus niñez y juventud, momentos, calles, juegos...

Momentos con su madurez, con tu vida que poco a poco se va haciendo, momentos con tu novio, pareja, marido o mujer, momentos con niños, con nietos...

Momentos con tus amigos de la infancia y de estos momentos, momentos con los que se fueron para no volver que son también momentos.

Momentos de cuando ibas creciendo en la Fe, de oración ante Dios en el mismo silencio...

Momentos de bajones y altivez, de cuando eras tan distinto a lo que ahora vas siendo, de cuando no te dabas cuenta de nada y ahora ves la realidad del tiempo.

Momentos que deleitan tus sentidos, momentos que son tuyos, tan intensos, como conversar con amigos en tertulias de otros tiempos, como un puro, un brandy, un libro en tu propio silencio, paseando ensoñador mirando no tanto lo que tienes afuera sino lo que está en ti tan adentro, momentos de caídas, momentos de levantarse y seguir corriendo, de apartarse del camino porque sabes no es tu momento, porque uno tiene que saber que su momento es su momento.

Sí, pienso que la vida son momentos que recorres más ligero o más lento pero si lo haces haciendo el Bien sin importarte los que te cuenten cuentos te aseguro vivirás bien porque nadie puede robar tus momentos.

¡Feliz viernes!

Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.