Buen día nos de Dios.
Muchas veces abrimos la puerta de nuestra vida de par en par sin saber de forma cierta que nos vamos a encontrar y a pesar de eso la abrimos y hacemos bien.
Porque si por nuestras inseguridades y propios miedos no la abrimos a lo mejor se está escapando de nuestras vidas lo mejor.
Muchas veces no damos ese necesario paso adelante porque solo vemos lo que queremos ver.
Después nos encontramos lo que nos encontramos que puede ser maravilloso o todo lo contrario aunque también no podamos ver absolutamente nada.
También el no ver nada es importante porque así vamos dando nosotros las pinceladas ante el inmenso lienzo en blanco que se presenta ante nosotros.
Sí, hoy es un buen día para abrir la puerta de nuestras vidas y hacer que brote el color más bello, impactante, alegre, transgresor y lleno de esperanza que podamos.
Pienso que cada vez que no abrimos la puerta estamos cercenando parte de nuestra propia vida.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario