Buenos días Villaluenga.
Buen día nos dé Dios.
Hoy es el día del Pilar y por tanto de España. Hoy se une Fe y Amor a la Madre de Dios junto a los que sentimos a España como nuestra Patria. Dos amores, dos quereres, diferentes pero que van cogidos de la mano.
Hoy miles de personas visitan a la Virgen del Pilar en Zaragoza, hoy miles de personas pasean con orgullo su patriotismo.
Pero el patriotismo no es cosa un día u otro sino de todos los días de tu vida porque es Amor y este nunca pasa.
A mí me gusta rezarle a la Virgen del Pilar pero a esas pequeñas imágenes que están en algunos altares de nuestras Iglesias. Sí, también ahí se condensa ese caudal de Fe y Amor en la Madre de Dios que es Pilar de nuestra Esperanza.
Pilar de Esperanza que hace nos sustentemos cada día que pasa pues cada día hay alegrías y tristezas, hay emociones y alguna que otra desilusión, hay sentimientos y también decepciones.
Me decía una persona querida el otro día que las decepciones verdaderas vienen de la mano de aquellos en los que confías y que no esperas puedan blandir esa daga que se clava en tu alma hasta desgarrarla profundamente provocando una herida que no llega a cicatrizar nunca.
Por eso, porque la vida nos la hemos montado demasiado mal a veces, hay que apoyarse con fuerza en ese Pilar que es María, Madre de toda Esperanza porque cuando no podemos más Ella nos ofrece el sendero que lleva al Camino que es Verdad, que es Vida y que es la Felicidad para todos nosotros.
Ansiamos ser felices, ansiamos ser comprendidos, ansiamos que nos amen pero no hacemos lo suficiente para hacer Feliz a los demás, Comprender a nuestros semejantes, Amar a todos los que nos rodean e incluso a aquellos que no nos pueden ni ver.
Por eso me gusta rezar en esa capilla escondida de una Iglesia cualquiera a esa sencilla imagen de la Virgen del Pilar que es lo mismo que hacerlo directamente a Ella pues noto como su Amor y Comprensión toca mi alma cicatrizando heridas y ofreciéndome esa ilusión, esa Esperanza, que tanto necesito para vivir.
En este día quiero Felicitar a todas las que llevan por nombre Su Nombre, a la Guardia Civil, a España y a mis hermanos de hispanoamérica.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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