Buen día nos de Dios.
Empieza agosto que es el mes más vacacional de todos. Muchos se apartan de los quehaceres diarios para meterse en ese enjambre que son los lugares típicos de vacaciones.
Lugares atestados de toda clase de gente que busca el secreto de la felicidad. Regueros de personas haciendo colas, esperando incluso un lugar donde poder poner una toalla, todas ávidas de un descanso que rara vez se consigue al cien por cien.
Muchas veces me pregunto el por qué todos hacen lo mismo que todos?
El por qué no intentamos plantearnos la vida de otra forma, más personal, más de uno...
A veces es necesario liarse la manta a la cabeza y hacer eso que casi nadie hace y por lo tanto asumimos unas vacaciones que bien pueden ser distraídas y a la vez nos relaje más para disfrutar de los nuestros o simplemente de la soledad.
Y entre estas horas de relajación, de disfrutar de eso que nos está vetado en el día a día, tendríamos que sacar ese tiempo absolutamente necesario para nosotros para dedicarnos a las cosas que Dios nos ofrece y encomienda.
Estamos de vacaciones también con nuestra relación con el Señor?
Recuerda que Él nunca las coge y está 24 horas pendiente de nosotros.
Feliz mes de agosto a todos.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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