Buen día nos dé Dios.
Algunas veces te sorprendes con actitudes de personas lejanas y también cercanas que hace que te descuadres y te preguntes eso de "qué parte de la historia me he perdido".
Si, porque muchas veces ves como muchos de los que te rodean cambian de actitud hacia ti sin tu haber dicho o hecho nada.
Estamos en una sociedad crispada y eso lo vemos cuando vamos en coche. Malas caras con mal semblante como pan nuestro de cada día. Y esta crispación hace que todo sea más sensible a la ofuscación con motivo o no.
Estamos en un mundo demasiado radicalizado donde todos queremos tener razón, pero nadie ofrece razones, donde nos instalamos en un innecesario dogmatismo donde lo que yo pienso no es que sea verdad sino la Verdad.
Estamos en una sociedad que nos cuesta la misma vida el ponernos en el pellejo del otro para comprender su actitud aunque discrepes y no compartas la misma.
Esto es más sencillo pues se trata de predicar con el ejemplo y teniendo como máxima que haría Jesús en mi lugar.
Y nunca olvidemos que Cristo es Amor y Misericordia. Para Él nadie sobraba, todos eran, somos, necesarios
A ver si nos aplicamos el cuento y dejamos las actitudes propias de la adolescencia para los adolescentes.
Y si alguien cambia de actitud hacia ti lo mejor es aclararlo pero no olvides que eso es una decisión a tomar en plural y no uno solo.
A veces pienso...
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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