Buenos días Villaluenga.
Buen día nos dé Dios.
Me gusta saborear el valor de los gestos que se hacen de corazón como el de ayer antes de que comenzara el Toro de Cuerda de nuestro bendito pueblo.
Antes de que el bullicio, los gritos, la euforia, la pasión caminara al trote como los toros cuando recorren las coquetas y empinadas calles del pueblo se hizo el silencio y todos se abrazaron a una para recordar a un vecino que ya no está aunque permanecerá siempre en nuestros recuerdos y corazones: José Miguel Calle Ruiz.
Ese minuto de silencio es tremendamente importante porque es un minuto de Amor.
Todo lo que se hace de corazón siempre llega a buen puerto, todo lo que se hace desde el desprendimiento, desde el agradecimiento, desde el cariño es justo y además necesario por la memoria de quién no está y con nosotros mismos que nos demostramos así como al resto del mundo de que el Amor todo lo puede, todo se consigue.
Por eso hoy domingo día del Señor y que en Villaluenga saldrá a la calle San Roque será un día de emociones y muchos recuerdos en torno a José Miguel, que no podrá dirigir a los costaleros, como a todos aquellos que ya no está con nosotros.
Sí, el valor de los gestos que se hacen de corazón no tienen precio.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
Esta reflexión va dedicada por completo a mi querido Jose Miguel Calle Ruizque ya goza de la Paz eterna así como a todos mis vecinos por ser verdaderamente ejemplares.
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