Buen día nos dé Dios.
Seamos faroles encendidos en la noche para nuestros semejantes.
Seamos esa luz que muchos necesitan para llegar al camino perdido.
Seamos calidez y abrazo para el que lo necesite.
Seamos mano amiga donde sujetarse en los malos momentos.
Seamos ese punto de luz cuando nada más que hayan tinieblas.
Seamos guías que lleven al único camino seguro y verdadero como es Dios.
Seamos faroles que portan la luz porque somos discípulos de Cristo que es Hermano, Maestro y Señor. Sólo con Él se alcanza ver, se distingue la Luz que impregna nuestras almas de un Amor que no se apaga nunca.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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