Buen día nos dé Dios.
¿Eres capaz de dejar todo por seguir a Jesús?
¿Si? ¿Pero, todo lo que se dice todo?
Pues permitidme que lo ponga en duda, porque hasta yo tengo mis dudas de que pudiera hacerlo.
Dejar todo como tu familia, amigos, lugares donde eres feliz, aficiones, prestigio por seguir a Cristo, por entregarte por entero a Él solo pueden hacerlos los llamados con ese tipo de vocación, con ese don de la entrega, cuando son tocados por las manos de Jesús que sabe ponerlas en nuestros hombros diciéndonos que nos necesita para hacer llegar el Reino de Dios a todos sin excepción.
Pero ese dejar "todo" no está solamente delimitado para los que vivan la vocación de vida ministerial sino a todos y cada uno de nosotros pues en verdad Cristo no nos exige algo que no podamos hacer, que nos sea perjudicial pues lo que quiere es la salvación de nuestras almas.
A lo mejor no es tanto como dejar la familia, amigos, lugares, aficiones, prestigio... sino el saber que tiene en ti un corazón entregado con esa clase de apasionamiento que hace nos entreguemos al ciento por uno a evangelizar en nuestros ámbitos de actuación, con palabras, hechos y testimonios de vida coherente en la Fe que creemos y decimos creer.
Es saber que nuestra alma no nos pertenece que es de Dios y por tanto tenemos que estar disponibles para cuando nos llame a realizar esa misión que solamente nosotros podemos hacer. Es saber que la evangelización empieza desde el ámbito más privado hasta el más universal, el estar bien formados para plantar cara con argumentos sólidos cuando la Iglesia es atacada por los enemigos de la misma que son lobos en medio de ovejas.
Es ser consciente de que somos de Jesús y que Él nos puede llamar en cualquier instante para que dejemos las redes porque tenemos que pescar en otros mares, en otros sitios, en otros lugares, y siempre para mayor gloria de Dios al que tenemos que Amar sobre todas las cosas así como a ese prójimo, cercano o lejano, que tenemos que hacerlo como a nosotros mismos.
Y es que ser de Cristo es muy fácil pues solo requiere abandonar lo accesorio y dejarte llevar por Él que es Camino, Verdad y Vida.
Feliz viernes.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario