Buenos días Villaluenga.
Buen día nos de Dios.
En nuestra propia vida hay momentos que son luminosos, donde la fulgurante luz lo envuelve todo, y otros donde caminamos en un angustioso claroscuro donde las imágenes de nuestro propio existir nos hace que sintamos que debemos avanzar pero el miedo nos retrotrae y hace que nos paremos.
Cuando la angustia, la desazón, el miedo, la inseguridad se instale en nosotros y nos haga encerrarnos en nuestro propio ser como si de un caparazón se tratara, cuando nos paremos porque no vemos nada claro y el mundo, este que vivimos todos los días, no nos ofrezca garantías.
Cuando te sientas abandonado de todos y casi de todo, entonces aparece Jesús, Luz en la oscuridad y Salvación de nuestras vidas perdidas, para mostrarnos el camino, como ese farolillo que nunca se apaga, y que junto a Él la senda más peligrosa y delicada se convierte en sencilla y accesible.
Y es Cristo es que se pone junto a nosotros en nuestra particular Vera+Cruz y nos acompaña en nuestro particular Calvario ofreciéndose como el mejor bálsamo que restaña nuestras heridas y el mejor sudario donde recostar nuestros malheridos cuerpos.
Sí, Jesús siempre está con nosotros: En la claridad de la Felicidad y la Gloria y en los claroscuros de la Vera+Cruz de nuestros propios miedos, dolores, sufrimientos, padecimientos.
¡Y es tan grande, tan hermoso, tan tranquilizador que esté ahí junto a nuestro lado!
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
Quiero dedicar a mis queridos Maru Segovia Antonio Treceño Olvera Alejandro Bao Jose Adolfo Baturone Jerez y Encarni Vazquez Rodriguez en su día. ¡¡Muchas felicidades!!
Y muy especialmente a mi hermano hospitalario en la fe del Señor Gonzalo J. Diaz-Alersi y a la querida Hermandad de Vera+Cruz de Cádiz en tan importante efeméride que celebra. Dios os bendiga y os guíe en vuestro importante y necesario apostolado.
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