Buen día nos de Dios. Hoy Domingo es el día del Señor y por eso, como siempre, debemos vivir en torno a Él. Muchas veces por las vicisitudes de la vida nos encontramos alejados de Dios, parece que nuestro caminar dista mucho de lo que Él quiere de nosotros, que ya no nos agrada Su Presencia. Entonces sucede algo que no nos lo explicamos desde el raciocinio humano, sentimos en lo más hondo de nuestro corazón como si una llama de amor impregnara todo nuestro ser y una voz nos susurra al corazón que nosotros somos hijos amados de Dios Padre. Vemos sin ver con nuestros terrenales ojos a Jesús que nos acompaña en ese caminar como a los discípulos de Emaús y sentimos que las cosas que nos alejaban del Señor se desvanecen en nuestras manos como puñado de arena para quedarnos con lo auténtico, con lo verdadero, con Dios. Jesús sale a nuestro encuentro todos los días, todas las horas a cada instante y lo hace porque como el Buen Pastor que es prefiere buscar a la oveja perdida de su rebaño, quiere rescatar ese alma perdida para que goce de la calma y la felicidad que es la Salvación. Hoy es un buen día para dar gracias a Dios por no dejarnos nunca, por amarnos con locura y por perdonarnos sin límites. Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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