Buen día nos de Dios. A veces nos levantamos con ciertas preocupaciones, no vemos el horizonte sino que una masa nubosa nos rodea hasta hacernos perder el equilibrio de las cosas y eso produce un sufrimiento que en la mayoría de las ocasiones es totalmente estéril. Cuando eso nos suceda debemos poner toda nuestra confianza en Dios porque Él mejor que nadie sabe lo que en verdad nos conviene y no permitirá que nos ocurra ningún mal. Nuestra vista no ve más allá en cambio la mirada del Señor penetra los muros más sólidos y fuertes. Dejemos descansar nuestros cuerpos y almas en el Sagrado Corazón de Jesús que es el Buen Pastor que cuida con mimo y esmero a todo su rebaño y nunca deja que le pase nada. Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario