Buen día nos de Dios. Nos complicamos en demasiadas ocasiones con temas que al final ni nos van ni nos vienen y eso nos acaba distrayendo de lo esencial e importante de la vida. Debemos priorizar lo que nos es necesario para vivir y dejar en la cuneta todo lo que nos hace daño y produce insatisfacción. Estamos aquí demasiado poco tiempo para andarnos con zarandajas porque cuando nos queremos dar cuenta todo ha pasado y hemos descuidado lo que no se debía haber hecho. Nos vamos de este mundo sin decir "te quiero" a la persona amada, lo importante que han sido algunos amigos, dar las gracias a tantos que siempre han estado contigo o pedir perdón a los que hicimos algún mal. En definitiva, poner en orden nuestras vidas y sentimientos antes que dejarnos atrapar por esa tela de araña en la que muchas veces nos hayamos totalmente perdidos. Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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