miércoles, 16 de marzo de 2016

16 de marzo. El día que yo me muera...



Buen día nos de Dios.

No puedo morir sin haber vivido antes entendiendo como tal que nos es hacer lo que quiera o desee sino entregarme para hacer Tu Voluntad.

En ti, Señor soy Feliz y encuentro siempre mi descanso. En ti soy hombre nuevo cada día pues cada día me renuevas la Fe con Amor y Esperanza.

El día que yo me muera quiero, ansío, presentar ante ti una alforja con la tarea hecha y donde el Amor sea la mejor presentación, el pegamento que una todo.

Aunque sé, porque me lo indicas todos los días en el Sagrario, que para ver tu rostro antes tengo que haberme fijado en el de los demás, mi prójimo, amigos, desconocidos, los que bien me quieren o los que incluso me llegan a odiar.

En todos estás Tú, Jesús y sobretodo en los que me hacen tanto daño pues si quiero ser un digno discípulo tuyo tengo que aprender a verlo todo con ojos de Misericordia y Amor.

Si, el día que yo me muera quiero ver tu rostro Señor aunque sean unos segundos que seguro me saben a gloria.

En el tranquilo gesto de Jesús Yacente pongo mis anhelos sabedor que Resucita y nos da la Vida más allá de la terrenal vida que hoy en día gozamos.

Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.

Quiero dedicar mi reflexión a Paco Bustamante Morejón por esta imagen que me dice tanto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario