Estamos a 48 horas de que a todos los españoles se nos invite a vivir un día de reflexión para que meditemos nuestro voto que deberemos emitir al día después con todas las consecuencias.
Consecuencias que siempre redundará en nosotros, los españolitos de a pie, porque los partidos, con sus tiras y aflojas, se entenderán entre ellos.
¡Por lo menos nos invitan a reflexionar que se mire por donde se mire siempre es bueno!
Porque hace falta reflexionar SIEMPRE, es un ejercicio inmensamente necesario para los que no pueden permanecer adormilados ante todo lo que ven, todo lo que saben, todo lo que piensan.
Reflexión y prudencia en los momentos álgidos de la vida: En la alegría, cuando eres distinguido con un honor, cuando eres motivo de credibilidad y admiración.
Reflexión y valor a la hora de Amar, de Perdonar, de entregarte por los demás. A la hora de defender a quienes quieres y te quieren, a la hora de posicionarte según la coherencia de vida, de creencia, de opión.
Reflexión y paciencia cuando eres vilmente atacado, cuando las ofensas llueven como si una tormenta arrasara el lugar, cuando estás en el ojo del huracán siempre ya sea por méritos propios o sobrevenidos. Cuando llegue el dolor, los padecimientos, la enfermedad...
Reflexión en la hondura de la soledad que puede ser escogida o ha llegado a ti por el abandono de muchos de tu barco. Reflexión que invita a reencontrarte contigo mismo, sin aspavientos innecesarios, sin culpas ni disculpas hacia todo lo que has hecho.
Reflexión en busca del silencio cuando estés rodeado del pertubardor ruido que haces no atines ni atiendas a nada ni nadie y lo que menos escuches sea la voz de la conciencia que sigue albergada en tu corazón.
Reflexión hecha Oración porque sabes que sin Dios no eres nada, no haces nada y además es ilusorio el pretender nada...
Reflexión para votar pero también para Amar, para agradecer, para sentir, para perdonar de forma mutua, para olvidar, para poner distancias con esos que solo ansían tu mal...
En España y en el mundo hace falta que muchos reflexionemos a diario, un ejercicio muy sano que con la práctica se hace un indispensable. Es el pensamiento la puerta de entrada a la reflexión madura, sosegada, con visión de futuro viviendo el presente y teniendo en cuenta también el pasado pues todos somos pasado, presente y si Dios lo quiere también futuro aunque lo que tenga que venir vendrá y nosotros poco o nada podremos hacer para remediarlo sino sembrar nuestro granito de arena para que la semilla fecunda de la Verdad, del Bien, de la Libertad, de Humanismo, de la Fe, se arraigue en buena tierra y de los frutos que sean necesarios.
Tenemos que reflexionar más, pensar más, y hablar menos porque ya sabemos que somos dueños de nuestros silencios y esclavos de las palabras. Desde la madurez de pensamiento te hace tener el suficiente criterio, la suficiente paciencia, la suficiente coherencia, la suficiente valentía para ser tú y no otro y desde ese prisma opinar, creer y pensar desde la Verda que nos hace Libres.
¡Feliz jueves!
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
Jesús Rodríguez Arias
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