lunes, 20 de enero de 2014

desde el tren. 20 de enero.

Buen día nos de Dios. ¡Qué nunca nos falte una sonrisa en los labios! Por muchas tristezas, pesares, enfermedades, preocupaciones que podamos tener el llevar una cara seria y circunspecta no va a mejorar nada y produce efectos negativos a los que te rodean. En cambio, si a pesar de todo ofreces una sonrisa a los que tienes al lado, a los que se te acercan es como si tendieras la mano y abrieras tu corazón a esos que también pueden necesitarlo. Llevamos un camino de ir aislándonos, cada cual con sus cosas y con sus casas mirando para abajo cuando caminamos o escuchando permanente música o noticias que da la sensación de no querernos escuchar a nosotros mismos. Todo gris en un mundo gris donde nos estamos olvidando de la inmensa gamas de colores que nos rodea a diario y que somos capaces de presenciar y admirar con solo una sonrisa. Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario