Buen día nos dé Dios.
Nuestra Fe crece mejor en comunidad, junto a nuestros hermanos, en la Iglesia y más en la local, en la cual estamos más arraigados y podemos sentir el apoyo y cariño que ofrece la cercanía de nuestros hermanos.
Doy gracias al Señor de haber ido madurando en mi camino de Fe de esta forma, de esta manera. Mi gran apostolado ha sido el cofrade pues desde antes de nacer lo he vivido aunque el devenir personal me haya hecho conocer otros y sobre todo la evangelización por medio de la red.
Esto que empezó hace años ya con pasos vacilantes y tímidos ha hecho que descubriera por mi mismo lo que es el significado real de la universalidad de nuestra Iglesia Católica. Me ha hecho conocer los problemas, las tribulaciones, la alegría y el testimonio de Fe de hermanos que radican en cualquier lugar de la Tierra.
Esto hace que tu visión cambie para bien más que para mal.
Por eso cuando me cuentan, me dicen, me participan cosas que pasan en nuestras comunidades más locales no lo vea desde el prisma limitado sino desde lo global y universal como es en verdad nuestra Madre Iglesia.
Jesús está aquí, allí, en todos los lados.
Doy gracias a Dios por permitirme seguir trabajando en sus mies de esta forma y manera que tanto me enseña, de la que tanto aprendo.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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