Buen día nos dé Dios.
Algunas veces pienso, veo y siento que mucho y muchos de los que nos rodean son como ese agua estancada que parece una cosa y es otra diametralmente diferente.
Por qué hay tantos que venden un mensaje haciéndonos creer que su obrar entra dentro de la generosidad de servir y en verdad lo que defienden son sus intereses que son más oscuros y pestilentes que el agua estancada?
Por qué hay tantos que viven en un sitio, se aprovechan del mismo, se acogen a todos los beneficios que ofrece y después lo critican en público y privado antes, durante y después? También esos me recuerdan al agua estancada.
Por qué nos "venden" lo mejor y después resulta ser todo mentira?
Por qué algunos por mantener los tentáculos de poder, por tenerlo todo controlado, son capaces de intimidar, mentir y zaherir para conseguir sus mezquinos intereses?
Por qué esos que se han encargado personalmente de mentir, acusar, insultar, destruir, atentar contra el honor a base de estudiadas infamias son tenidos como referentes por los que los encumbran y por quienes los temen?
Podríamos poner innumerables ejemplos y todos serán ciertos, todos serán comprensibles, todos en mayor o menor medida nos resultarán cercanos.
Y es que hace falta que suba la marea para el agua estancada sea arrastrada, hay que coger el cubo para echarlo a la alcantarilla que es su sitio natural y donde pervive por siempre.
Hace falta una buena limpieza y abrir las ventanas para que el aire puro entre a sus anchas y limpie cada rincón de este mundo que entre unos y otros hemos creado.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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