Buen día nos dé Dios.
Dicen que después del temporal llega la calma lo que pasa es que a veces el primero es tan fuerte que no sabemos valorar en su justa medida cuando el sosiego ha inundado nuestros corazones llenos de inquietud.
Parece que este mundo construido para el disfrute, para ganar dinero, para hacer lo que se quiera aunque moleste al vecino, nos hace vivir con un grado de superación constante porque eres no tanto por lo que vales sino por lo que eres capaz de hacer, nos pone tantas metas y tantas trabas que hace nos que tengamos que rendir por ausencia de fuerzas.
La vida del mundo no es la que nos ofrece Dios, la vida del mundo valora lo material y desprecia lo espiritual y así nos va...
Por eso es bueno navegar sorteando el temporal, navegar contra corriente, navegar de la mano de Jesús que es el único que nos ofrece la Paz, la tranquilidad, el sosiego hasta cuándo el temporal sea fuerte y no nos deje ver el horizonte.
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario