Buen día nos de Dios. Al mundo le hace falta apóstoles que propaguen la Palabra de Dios. Todos debemos coger ese testigo porque no hay trabajo, encomienda o responsabilidad mayor que llevar el Reino de Dios a todos los hombres y mujeres sin condición. Esto es lo que hizo toda su vida el Padre Jorge Loring S.J. que asimiló desde el primer momento su condición de apóstol y en eso enfrascó su vida hasta cuando no podía ni con su alma. En él se entiende cuando oímos que trabajar por dar a conocer a Cristo no entiende ni al cansancio ni a la fatiga. Ayer día de Navidad fue llamado a la Casa del Padre como no podía ser de otra forma. Viendo el ejemplo del Padre Loring o de otros que se han entregado a su misión evangelizadora no tenemos más remedio que ponernos las pilas, pedirle fuerzas al Señor y realizar la tarea que cada uno de nosotros tengamos encomendada. Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario