Buen día nos de Dios. ¿Estamos haciendo todo lo suficiente para que nuestros hijos crezcan en la fe? Creo que no. En estos tiempos de agobios por no tener tiempo dejamos todo lo referente a Dios y a la fe en manos de los educadores y catequistas y no podemos olvidar que estos complementan la educación pero no hacen vivir en Dios desde la más tierna infancia. Estos dan conocimientos y en la familia se vive la fe. Ahora que no tenemos tiempo para lo trascendental aunque si lo ocupamos en otros menesteres necesarios o no que llenan la cartera y el alma de baratijas y nos olvidamos de ese gran tesoro que es la fe. Ponemos en manos de terceros lo que es esencial en la vida y nosotros mismos nos vamos olvidando de nuestra particular relación con el Señor apareciendo el Maligno y sus nuevas mañas: El atractivo esoterismo, gnosticismo y todo lo concerniente a la Nueva Era. Estos también son grandes peligros pues con sus técnicas y tácticas no va haciendo olvidar a Dios. Estemos atentos y prestemos la dedicación que merecen nuestros pequeños porque su salvación y la nuestra está en juego. Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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