Buen día nos dé Dios.
Hoy era uno esos Jueves de antaño en los que lucía más el sol pues se celebraba la Solemnidad del Cuerpo y Sangre de Nuestro Señor Jesucristo y que hace ya bastante se eliminó del calendario para trasladarlo al domingo quitándole toda la esencia que tenía ese día.
Hoy cuando me he despertado me han venido imágenes de esas procesiones de Corpus que todavía se mantienen fiel a la antigua usanza y en la mañana de este último día de la primavera recorre las españolas calles de Toledo, Granada y Sevilla donde gozarán de un día, de un jueves, eminentemente eucarístico.
Será este próximo y veraniego domingo 23 de junio cuando se celebre la Solemnidad de Solemnidades en todos los pueblos y ciudades de España donde se ofrecerán las distintas Eucaristías que estarán preparadas con el mimo, el celo, el rigor, que Dios merece para después salir Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar por la calles de cada lugar al reencuentro con tantos que se pierden en imágenes mientras está a pocos pasos en Presencia Viva.
También irá al encuentro de esos que le rehuyen y le niegan el pan y la sal, de esos que no quieren saber nada de la Iglesia porque no se sienten parte de ella, de esos que le vuelven la cara porque quieren volversela a alguien en concreto.
Pero lo que no saben ni unos ni otros es que Dios es el Dios de todos: De los que creemos en Él, los que lo amamos y nos entregamos a su voluntad, y también de esos que no quieren ni saben creer, los que le vuelven la cara porque discrepan con las cosas de la tierra y no son capaces de fijarse en las del cielo, de esos que incluso le atacan.
Dios es Amor y por tanto es Caridad, es Misericordia, es Perdón, es Fe, es Esperanza.... Y también Justicia.
Prefiero la Justicia de quién es el Creador de todo lo visible e invisible, del que nos ama sin ningún límite, que la justicia de los "justos" de este mundo que señalan, juzgan y condenan según sus intereses o torcida voluntad.
Dios nos ofreció a su Unigénito para nuestra Salvación y tanto este Jueves, que lucía en antaño más que el sol, como el próximo domingo Jesús, cinco letras que se graban en mi corazón a fuego, se hará más presente de lo que ya está cada día de nuestros días en nuestra vida.
Tanto hoy como este domingo Jesús volverá a reencontrarse con todos nosotros y lo hará desde la máxima solemnidad y majestuosidad que en algunos lugares es santo y seña por su medido y cuidado protocolo como en aquellos pequeños lugares donde se hace realidad lo que es "La Pureza de lo Auténtico" porque es un Corpus sencillo, lleno de humildad, que transpira y expande esa clase de Fe, de Devoción, que se transmite uno a otros siempre desde las distancias cortas.
Todas necesarias, todas de incalculable valor espiritual, todas majestuosas porque quién camina con nosotros en el mismo Jesús en Presencia Viva aunque yo en esta etapa de mi vida, en esta etapa de necesario alejamiento, prefiero gozar de esa procesión tan íntima, tan sencilla, tan humilde, tan de distancias cortas porque será que con los años prefiero vivir desde esa distancia corta que tanto gratifica, tanto me ayuda, a tanto me implica y tanto me aporta.
En este Jueves que lucía más que el Sol, en el próximo domingo en el que se celebra la Solemnidad y siempre: ¡Alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar! ¡Sea por siempre bendito y alabado!
Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.
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